Recetas Con Algo De Cuento

Me gusta la sidra como bebida que puede acompañar cualquier comida. Me fascina su sabor a manzana, sus burbujas y el aroma que desprende cuando se sirve. También me sorprenden la cantidad de recetas que hay para incorporar esta bebida como elemento esencial de un plato, recuerdo por ejemplo los escalopines a la sidra. En esta ocasión no quiero hablar de recetas sino del Museo de la Sidra que puede visitarse en Asturias, concretamente en Villa de Nava. Un museo que no se presenta como un museo tradicional, este exige que el visitante participe activamente

Así, mediante un sistema expositivo envolvente se pretende transmitir toda la información posible con respecto a la producción, consumo e historia de la sidra. Se recorre el museo a la vez que se avanza paralelamente en el ciclo de la sidra. El museo recrea un lagar con sus utensilios, herramientas, peculiaridades y máquinas utilizadas para la elaboración de esta especial bebida.

Me gusta recomendar visitar estos museos porque nos recuerdan como se ha trabajado en el pasado un producto de calidad que hoy esta al alcance de todos.

El Museo del Chocolate de Barcelona es un equipamiento dinámico impulsado por el Gremio Provincial de Pastelería de Barcelona, ubicado en el antiguo convento de Sant Agustí, que presenta un recorrido por los orígenes del chocolate, su llegada a Europa y su difusión como un elemento situado entre el mito y la realidad, entre las propiedades medicinales y el valor nutritivo, que relacionan tradición con futuro y que forman parte de nuestro imaginario colectivo.

Por ejemplo en el siglo XVIII el ejército borbónico era un fanático consumidor de este producto, y según las ordenanzas, el chocolate estaba presente en los menús de las academias militares del siglo XVIII: «Para desayuno de cada cadete y oficial de compañía se dará onza y media de chocolate con un cuarterón de pan...», y cuando la tropa estaba de guarnición en los cuarteles también se tomaba usualmente chocolate. El cuerpo de alabarderos, la guardia personal del monarca, era llamado, con envidia, «los chocolateros», pues al ser un cuerpo mimado y de élite, tomaba mucho chocolate.

Este museo no solo cuenta o relata sino que educa al visitante al proponer una variada gama de servicios educativos que abarcan talleres y catas, maridajes de vino y cavas con chocolate etc todos ellos destinados a profundizar en el chocolate y sus bendiciones. En mi próxima visita a Barcelona pienso catar este museo.

Este nuevo año comienza con la celebración del 125 aniversario de la muerte del pintor Holandés Vincent Van Gogh. Hollanda, la tierra de los tulipanes, se prepara para celebrar este evento con una variada oferta cultural combinada con la culinaria. No en vano, Hollanda se ha posicionado en los últimos años como un país con una propuesta gastronómica interesante y realzada con las estrellas michelin de muchos de sus restaurantes.

Los restaurantes cercanos a los museos que exponen obras del pintor, han diseñado cartas inspiradas en sus cuadros. Tanto el Museo Kroller-Muller como el propio museo Van Gogh en la capital destacan como oferta complementaria a la pictórica, esta opción de ensayar sabores con arte. Estos menus incluyen al menos tres ingredientes inspirados en las obras del pintor.

La cocina española ha heredado platos y tradiciones de otras culturas que pasaron por la península ibérica. Un ejemplo de ello es la cocina andaluza que incorpora muchos platos de la cultura árabe. Para conocer un poco más en profundidad esa herencia, recomiendo ver este video.

Uno de los aspectos que han merecido especial atención  por parte de los reyes de todas las épocas han sido los banquetes reales en los que no solo se prestaba atención a lo que se servía sino como se servía: continente y contenido en armonía y sincronía perfecta. Palabras como vajillas de Sevres, cristal de Bohemia las relacionamos con calidad, sofisticación, lujo y tradición. Es frecuente encontrar en aquellos palacios que están musealizados, salas y vitrinas dedicadas a la exposición de las vajillas tanto de diario como de gala. El Museo del Hermitage en su sede de Amsterdam, ha expuesto las vajillas de las mesas de los Zares: se han montado reproducciones de los banquetes con las porcelanas originales intentando recrear la magnificencia y solemnidad que acompañaban tales ocasiones y de las cuales los libros de historia han dado parte. El visitante podrá conocer las reglas que regían la etiqueta en estos reales eventos, la disposición de los comensales, que viandas y en que orden se servían así como se preparaba  el banquete desde las cocinas. Un numero de mil treinta y cuatro piezas que comprenden vajillas, centros y fuentes remarcan el esplendor de los Zares en cuyas cortes se servían hasta un numero de cien platos. Una magnifica ocasión para viajar a un pasado lleno de un esplendor irrepetible.

¿Te gusta el champán  viuda de Clicquot?. Es uno de mis favoritos desde luego. Y una de las cosas que mas me gustan de el, es que tras su calidad y elaboración se esconde el talento de una gran mujer sola, fuerte y emprendedora:

"El 23 de octubre de ?805, François Clicquot, hijo del fundador de una emergente marca de champagne, murió de unas fiebres malignas dejando al frente del negocio a su desconsolada viuda. Nicole Barbe-Ponsardin contaba con 27 años y nula experiencia cuando se hizo cargo de la firma, pero terminaría convirtiendo la pequeña empresa familiar, rebautizada como Veuve Clicquot-Ponsardin, en uno de los más poderosos emporios del vino espumoso mundial."

El Tambourin también fue lugar de exposiciones. Van Gogh realizó una exposición colectiva en 1887 con Èmile Bernard, Paul Gauguin y Toulouse-Lautrec en dicho local pero la exposición fue un fracaso y además terminó con una reyerta en la que Vincent resultó herido por un individuo que se cree, era el nuevo amante de La Segatori y que supuso también el final de la breve relación sentimental entre ambos.

El local fue cerrado y embargado unos meses después y toda la produción pictórica colgada en sus paredes fue tasada junto con el resto del local a un precio ridículo.

Van Gogh pintó a Agostina Segatori en al menos dos ocasiones en 1877. Agostina Segatori murió en 1910 en su casa de la Place du Tertre, en pleno Montmartre, llevándose con ella los secretos de su corta relación con aquel loco genial que fue Vincent Van Gogh."

Lluïsa Vidal fue una de las pocas mujeres que se sustentó económicamente por medio de su obra, contando con el respeto y reconocimiento de la comunidad artística del momento. Personaje polifacético, Vidal destacó por sus sinceros retratos, su habilidad para el dibujo y la ilustración en revistas y publicaciones. Plasmó, con la veracidad que la caracterizaba, la vida cotidiana y la sociedad de su época.

Muchas mujeres de su época se dedicaron a la pintura, pero fue Lluïsa Vidal el principal exponente femenino de la pintura modernista. Se ganó el reconocimiento de la comunidad artística del momento, lo que se deduce de las buenas críticas que recibió tras participar en las exposiciones en la Sala Parés. La artista difundió su estilo y vendió su obra a través de estos espacios. En 1919, un año después de su muerte, se organizó en la Sala Parés una exposición reconociendo su trayectoria, la última, hasta ahora, en Barcelona, su ciudad.

Lluïsa Vidal, luchadora y comprometida, participó en el movimiento feminista de la época y se rodeó de importantes figuras como Carme Karr, líder de la corriente feminista burguesa (Teresa Claramunt lo sería del movimiento obrero), Francesca Bonnemaison o Dolors de Monserdà. Formó parte de importantes iniciativas como el Instituto de Cultura y Biblioteca Popular para la Mujer, fundado por Bonnemaison en 1909; el Patronato de Obreras de la Aguja, fundado por Monserdà; la Llar, residencia de estudiantes y profesores impulsada por Karr; y el Comité Femenino Pacifista de Cataluña, ideado por Monserdà y Karr en 1915. El motor fundamental de su participación fue siempre servir como impulsora del aprendizaje de la mujer.

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La familia Vidal pertenecía a la burguesía catalana, por lo que la pintora conocía bien el lujo, el ocio y los eventos sociales propios de su clase. A pesar de ello, prefirió retratar a sus allegados y captar escenas del natural. Suzzane, abuela materna, mujer de fuerte carácter, transmitió a su hija, la madre de la artista, la inquietud por la educación intelectual necesaria para la mujer. Su expresión sincera, cómplice, nos habla del gran aprecio de la pintora por su abuela. Ésta destaca sobre un fondo verde de gran luminosidad que contrasta con los cabellos. La mezcla de varias tonalidades facilita una intuitiva y natural transición entre el fondo y la figura. Muchas de las críticas que recibió la pintora hacían hincapié en la ‘pincelada masculina’ y el estilo ‘varonil’ de su pintura, por lo que se consideraba a la pintora como una excepción en el mundo del arte. Pero Vidal destacó como artista, en toda su esencia, por la seguridad de su pintura, su amplia pincelada y la observación del natural. Mujer hecha a sí misma, de personalidad única y, como diría uno de sus críticos y amigo, Raimon Casellas, la pintora destaca por ser la única pintora que ha producido el actual movimiento artístico en Cataluña

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Hace ya varios años que vivimos "el boom de los cupcakes", versión anglosajona de nuestras tradicionales magdalenas..., decorados estos con colores y capas de mantequilla con adornos que les hace convertirse más en objeto de contemplación y decoración aunque estos se coman obviamente....

Hace años se hablaba de que en la historia del arte no existían apenas mujeres pintoras, muestra  de ello es que las mujeres no habían podido elegir libremente sus profesiones y de que eran otros los que regían sus destinos vitales. Contra lo que pudiera parecer, son muchas las mujeres vinculadas a los oficios artísticos, los nombres de muchas fueron silenciados o borrados, otras utilizaron seudónimos, otros se perdieron en el devenir de los tiempos. Pero gracias a la labor investigadora de muchos historiadores, contamos hoy en día con un mas que importante inventario de mujeres artistas si bien recomponer su biografía no es algo fácil de lograr dado los escasos testimonios escritos que han quedado sobre ellas y sus vidas.

Un ejemplo de estas mujeres es la pintora flamenca Clara Peeters, nacida en Amberes en 1594.

Investigando un poco mas he descubierto gracias al blog mujeres pintoras que en el National Museum of Women in the Arts de Washington se encuentra su obra "Bodegón con pescado y gato". 

Clara Peeters tiene una especial importancia en este museo, ya que sus fundadores, Wilhelmina Cole y Wallace F. Holladay, coleccionistas de arte, sintieron el impulso de fomentar la conservación y difusión de obras de artistas mujeres cuando quedaron impresionados por una obra de Clara Peeters ubicada en una galería de Viena y unos días más tarde por otra ubicada en el Museo del Prado. Cuando la señora Holladay intentó averiguar más datos de esta artista en el libro que habitualmente consultaba (H. W. Janson’s History of Art), halló que no mencionaba ni a esta ni a ninguna otra mujer artista, quedando tan sorprendida por la omisión que en adelante se empeñó en coleccionar y redescubrir el arte de las mujeres. El cuadro “Naturaleza Muerta con Pescado y Gato” fue adquirido por la pareja y donado al National Museum of Women in the Art. La base de datos de este museo también se llama Clara, en honor a esta pintora.

Cuadros llenos de sabor, talento y pasion.