Epistolario Culinario

20:18:00

Epistolario Culinario: dícese del libro o cuaderno en que se hallan recogidas varias cartas o epístolas de un autor o de varios, escritas a diferentes personas sobre gastronomía o artes culinarios.

Aunque el género epistolar es bastante común en la historia de la literatura y aunque quizás alguno de nosotros haya participado del ejercicio del mismo, es menester notar que seguro que no lo hemos ejercido con la fineza, agudeza y profundidad que aplicaron en sus cartas el Dr. Thebaussem y un Cocinero de Su Majestad. Estos dos nombres esconden personajes singulares sin duda, que en 1876 inician un intercambio de correspondencia gastronómica que se extendió hasta el año 1882. En esas cartas fueron dejando sus opiniones más diversas sobre todo lo que se relacionaba con la gastronomía.
 ¿Quienes eran tales personajes?. El nombre del Dr. Thebaussem encierra tras su sonoridad al escritor gaditano Mariano Pardo de Figueroa y Serna. Nació en Medina Sidonia, tras estudiar en Sevilla y pasar algún tiempo en Madrid, vuelve a si tierra donde se retira y donde crea al Dr. Thebaussem. Interesado en la gastronomía, en esas cartas desvelaba que le molestaban en sobremanera los menús españoles empezado por los de la Casa Real y que se escribieran en francés con faltas ortográficas incluidas.
El doctor Thebussem opinaba que “en España sólo las clases altas y las bajas son las secciones de la sociedad que tienen conciencia de que su mesa no les pone en ridículo”. La clase media, decia, “que verdaderamente representa al país, ni come ni, sabe comer, y sus banquetes, lejos de tener la apariencia de un placer lícito y honesto, se asemejan al cumplimiento de una obligación penosa. Lo que esa clase media califica de alta cocina son unos guisos incomibles”.
Aspectos de este singular personajes así como su vida son tratados en el libro del escritor sevillano Iñigo Ybarra Mencos:” El doctor Thebaussem. La realidad de la ficción”.


 Y ¿quien era el Cocinero De Su Majestad?, ¿verdaderamente hubo tal cocinero?. No lo hubo, es otra invención. Bajo ese nombre se ocultaba la personalidad de D. Jose de Castro y Serrano escritor de cierto renombre en la corte de Madrid. Fue también miembro de la Real Academia de la Lengua y de la de Bellas Artes de San Fernando.
Además fue cronista social y periodista. Amante de la buena mesa, inició con ese seudónimo una animada correspondencia con el Dr. Thebaussem durante la cual intercambiaron pareceres y opiniones en el que plasmaron sus singulares individualidades que aun reconociendo “que ni comen ni beben en exceso” si son por el contrario ambos  partidarios “de que se coma y beba bien”.
Después de un siglo, esa correspondencia es recogida en el libro la “Mesa Moderna”,que merece la pena ser leída.

Me pregunto cual seria el equivalente en nuestro recién estrenado siglo XXI de esta correspondencia.
¿Serán los correos electrónicos ese equivalente? Lo dudo ya que apenas escribimos correos con la estructura de una carta y pocas veces su contenido se revela a otros. ¿Podrían ser Facebook y Twitter sus iguales?, creo que no. Estos dos medios son para mensajes breves casi titulares que proporcionan una píldora de información.
¿Podrían ser los blog? Quizás para el que lo escribe como tribuna de opinión pero no para el receptor que no cuenta quizás con una vía suficientemente amplia que le permita desarrollar su respuesta.
Me temo que lo hemos perdido el genero epistolar como medio de exponer nuestros puntos de vista mas personales de manera cuidada y razonada.
Estamos ante otra perdida literaria que la innovación tecnológica destruye sin proponérselo ni saberlo.

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