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jueves, 23 de octubre de 2014

Criadas que sirven, Mujeres que trabajan

Jean-Étienne Liotard
Una de las profesiones que ha realizado la mujer de manera constante  a lo largo de la historia ha sido la de criada: de sus señoras, señores, reyes y nobles. Trabajos duros, mal pagados que en modo alguno la dignificaban aunque el arte nos muestre una visión idealizada de ese oficio.
Una criada del siglo XIV relató todos sus trabajos: hilar, rastrillar, cardar, tejer, limpiar los conejos, elaborar bebidas, hornear, cosechar, quitar malas hierbas, ordeñar. Alimentar los cerdos y limpiar pocilgas, hacer camas, barrer, fregar, limpiar cacharros, recoger leña y encender fuego, hervir leche, limpiar fogón, hacer queso, y que todo esté en orden.
Nunca fue fácil ser mujer y mucho menos cuando los derechos mas mínimos del ser humano todavía no se habían consagrado en textos constitucionales. Disfrutemos hoy de esas conquistas.

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